procesos de producción

“Las palabras no se pueden explicar sino a través de otras palabras.”
Roland Barthes.




Hoy en día el arte se mueve para distintos lados y distintas formas, distintos lenguajes y expresiones. El arte de un principio se dedico a imitar y a representar lo que visualmente nos entregaba el mundo. Después hubo un periodo donde buscaban nuevos estilos, maneras y formas. Pero hoy en día el arte contemporáneo se mueve de una forma particular, de siendo de una forma única pero se encuentran singularidades. Una forma singular es la que nos muestra el autor Nicolas Bourriaud en su libro post-producción.
Bourriaud nos habla de cómo utilizamos estos nuevos lenguajes del arte, y de cómo utilizamos la imagen en el mundo del arte actual. La materia con la cual manipulamos las imágenes que tratamos en las artes visuales ya no es la materia que se utilizaba cuando la creación era de una tela en blanco. La creación anteriormente partía de la imaginación y creación única del autor. No había intermediario con el cual materia construida podía ser manipulada, sino que la materia en las artes siempre tenía que ser esporádica, en conclusión el arte tenía que crearse de una generación espontanea. Pero todo esto es lo contrario a lo que nos plantea Bourriaud ya que nos habla de cómo generar obras a través de lo que ya podemos tomar y no a la base de lo que podemos construir con materias primas.
Entonces tenemos obras ya existentes que podemos reprogramar y volver a editar. Un ejemplo común es la Monalisa de Duchamp donde utiliza la imagen de la Monalisa y la ubica en otro contexto. Primero por el tiempo que trastoco en la obra, ya que aunque sea la misma obra en el momento de presentarla en otro periodo histórico toma otro sentido y toma otra importancia. Pintar la Monalisa hoy en día no tiene mucho sentido, pero trastocar la obra volviéndola a presentar.
Habitar estilos ya pensados o ya presentados es otra forma utilizada por los artistas. Las formas o estilos que nos presenta la historia del arte son unos de los soportes básicos para volver a armar una obra. El pigmento ya existe, los tipos de pinceladas ya están hechos, y los autores ya están dados para tomarlos utilizar los diferentes juegos de material que algún dia otros experimentaron por nosotros.
Las imágenes que podemos crear son muchas y variadas. Pero la historia de la imagen es muy antigua como para pensar que podemos crear una imagen nueva sin llegar a un parecido alguno con una imagen anterior. La utilización de imágenes anteriores es un recurso común en los artistas, las imágenes iconos de Warhol son la manifestación clara de cómo el trabajo posterior a una imagen ya tratada se transforma en un trabajo original. Trabajar artísticamente sobre una imagen ya tratada es un trabajo que hasta el artista Cienfuegos (Chileno) se instala a través de estos procesos para producir obras.
Manipular los materiales visuales que deja nuestra sociedad también es un modo de producir que no miente al momento de utilizar y reutilizar. Ya sean los materiales sobrantes que deja nuestra sociedad o los elementos visuales más allá de lo tactible. Se puede ver en instalaciones donde se mezclan materiales producidos por la sociedad. O también el Arte Povera donde se utilizan la basura que deja la sociedad, donde esa basura se transforma en basura interesante.
Investir la moda, los medios masivos como un repertorio dentro del arte el otro modo visible de producir una obra de arte. Los video arte utilizan la materia de los mass media y todo lo que nos puede entregar la televisión. La cultura a veces llamada huachaca nos da un imaginario visual tremendo con respecto a poder manipular iconos o imágenes potenciales. La moda que se utilizan en estos medios comerciales son medios que repercuten exponencialmente en masa consumidora. El poder jugar y trasvestir estas imágenes es uno de los modos de producción que genera el arte, a veces, para criticar.

En conclusión todos estos modos de producir se pueden englobar en como poder jugar con el poder de las imágenes. El poder visual que generan algunas imágenes, incluso algunas imágenes que no generan tano poder son las que los artistas utilizan para sus procesos y producir un poder distinto con una imagen ya utilizada con anterioridad. El uso de objetos, formas, del mundo y como habitar la cultura global son los recursos que ahora pareciesen primarios para los artistas, siendo que estos ya están prefabricados o ya elaborados.
Lo que resulta de esto ya no es un preguntarse como producir algo nuevo, sino que se trata de hacer obras con las cosas que podemos rescatar desde otros lados. ¿Como producir singularidad a partir de la masa caótica de objetos nombres propios y referencias que constituye nuestro ámbito cotidiano? Esa es la pregunta escencial para comenzar los procesos que constituyen una obra. Programa formas ya existentes y transformarlas en imágenes visuales y obras potenciales.
Incluso al leer el texto de Bourriaud nos damos cuenta que lo único que le quedo por explicar para sellar su libro es la sencilla razón que él solo mezclo palabras, conceptos e ideas ya predeterminadas. Roland Barthes ya nos hablaba de estos conceptos en la muerte del autor, citándolo textualmente: “Un código no puede ser destruido, tan solo es posible *burlarlo*”. Así cuando hablamos de las imágenes como un código nos damos cuenta de que no podemos destruir el poder que genera la imagen anterior a la que podemos construir nosotros, sino que solo podemos, como dice Barthes, burlar el hecho de crear desde la nada y poder producir desde estas imágenes, objetos y formas preexistentes.